Organización Cimientos
A finales del siglo XX se funda Organización Cimientos como un proyecto que tiene el propósito de servir a los seres humanos en la construcción de una nueva civilización basada en los principios del Amor.
Esta iniciativa surge como una misión para proveer información en un momento en que la humanidad ha alcanzado la madurez como humanos y requiere avanzar en la nueva época despierto -conectado con su ser interior- hacia la unificación como una comunidad planetaria.
Sus fundadores, Claudia Soto y Eduardo Bravo, son dos personas que han desarrollado sus vidas como pareja permitiendo experimentar el proceso de unificación, aprendiendo a conducirse a través de la comprensión acerca de la leyes universales. Un proceso que requiere formar la voluntad interna (el guerrero espiritual) para ir transcendiendo las limitaciones mentales y lograr soltarse a la aventura de vivir guiados desde su centro de conciencia y no desde la personalidad.
Como profesionales cuentan con estudios de posgrado en ciencias económicas y sociales y han actuado en empresas privadas y gubernamentales como funcionarios, investigadores y consultores. Durante sus vidas en pareja han tenido el acompañamiento de guías espirituales. De manera permanente, se encuentran los maestros ascendidos encargados de los procesos sociales que están guiando a la humanidad. Son estudiantes graduados de Maestría en Amor de la Escuela de Magia en Amor de Gerardo Schmedling donde conocieron acerca de leyes universales. También conocieron sobre física cuántica a través de las enseñanzas de Ramtha y de la conservación de la energía interna con Mantak Chia.
Ahora, como parte de su misión, Organización Cimientos pone a su disposición este sitio web «el puente al siglo xxi» como una guía de los maestros espirituales para avanzar en el camino del ser humano en el nuevo cambio de época que inició a finales del siglo XX.
Las leyes universales
Las leyes universales son una herramienta de la divinidad que nos permite elevar nuestra comprensión acerca del funcionamiento del universo y de la vida, aumentando nuestra capacidad de amar al aprender a ser felices por si mismos sin depender de nada ni de nadie y a respetar toda forma de vida en el universo.
La obediencia a las leyes universales es un acto voluntario, consciente, que le permite al ser humano entrar a formar parte de Mundos Unidos. Esta se materializa cuando decidimos aceptar, asumir y actuar en la vida con sabiduría y se reflejan afuera como valores de agradecimiento, valoración y respeto a todo lo que nos rodea.
Aceptar
Aceptar la vida con sabiduría es reconocer la experiencia de vivir como una oportunidad para evolucionar pues ella es la que enriquece nuestras vidas, siendo perfecta para mi.
Asumir
Asumir la vida con sabiduría es tomar la responsabilidad total de mis acciones pues la vida es el resultado exclusivamente de mis decisiones.
Actuar
Actuar en la vida con sabiduría es aprovechar las experiencias para aprender de los errores porque es a través de ellos que podemos construir una vida extraordinaria.
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Claudia Patricia Soto Valencia
Fundadora
Eduardo Bravo Retrepo
Fundador